¿Por qué es necesaria una meniscectomía?
- La meniscectomía es la cirugía en la que se retira el tejido desgarrado de un menisco roto, con el fin de eliminar los dolores en la zona y desbloquear la articulación para recuperar la movilidad.
- Las lesiones o roturas de menisco pueden producirse por diversos motivos siendo los más comunes: caídas, prácticas deportivas de alto rendimiento o desgaste debido a la edad.
- La meniscectomía es una cirugía se realiza con anestesia regional y mediante artroscopia, técnica de mínima invasión que asegura una recuperación más llevadera y rápida.
Aunque seguramente ya lo sepas, en el caso de una lesión de menisco se opta por el tratamiento quirúrgico siempre que los tratamientos conservadores no quirúrgicos (RICE: reposo, hielo, compresión y elevación) no surtan efecto o no sea posible su realización, recomendándose la cirugía de reparación.
En el caso de la meniscectomía, esta cirugía se realiza cuando una lesión o rotura de menisco provoca molestias, dolores y otros síntomas que conllevan el bloqueo de la rodilla y limitan la vida del paciente afectado. Generalmente, esta cirugía se recomienda tanto en personas jóvenes como en adultos de edad avanzada, siendo la causa más común de la lesión del menisco un traumatismo durante la práctica de alguna actividad deportiva o tras otro tipo sobreesfuerzo de la articulación (subir escaleras, caída, etc.).
La meniscectomía es la extirpación quirúrgica de una mínima parte o la totalidad de un menisco desgarrado.
La meniscectomía se realiza con el objetivo de mejorar la calidad de vida del paciente, además de devolverle la movilidad normal a la rodilla afectada desbloqueándola. Si bien la meniscectomía es una técnica concreta dentro de la operación de menisco por artroscopia, la reparación del menisco afectado puede llevarse a cabo por otras vías siempre que fuera posible, aunque la más habitual es la técnica de meniscectomía parcial. Estas técnicas son la sutura de menisco, haciendo un trasplante de menisco (en caso de pacientes que se van a reintervenir de la misma lesión) o como última opción, realizarse un implante de colágeno (proceso que se realiza muy rara vez). Por ello, uno de los puntos clave antes de recurrir a cualquier tipo de cirugía es contar con un especialista en rodilla que tras una valoración exhaustiva te indique la mejor opción.